Reseña realizada por
ROBERT GARCIA
TITULO ORIGINAL: L'assassino
è ancora tra noi
TITULO EN ESPAÑA: -----
IMDB: Pinchar aquí
AÑO DE PRODUCCIÓN: 1986
DIRECTOR: Camillo Teti
REPARTO: Mariangela
D'Abbraccio
Giovanni Visentin
Riccardo Parisio Perrotti
Luigi Mezzanotte
Yvonne D'Abbraccio
Francesco Capitano
EDICIONES ESPAÑOLAS EN
VÍDEO: -----
EDICIONES ESPAÑOLAS EN
DVD: -----
SINOPSIS: Una serie de
brutales asesinatos vienen ocurriendo en los últimos meses. Christiana, una
joven estudiante de criminología está decidida a investigar los hechos y
aprovecharlos para su tesis doctoral.
COMENTARIO: Cuando alguien
dirige ocho largometrajes en veinte largos años, y cuando estos han pasado con más
pena que gloria por la extensísima filmografía italiana, está claro que estamos
ante un director mediocre y sin mucho reconocimiento. Estamos ante la opera
prima de Camillo Teti, uno de los peores giallo que el que les escribe ha
tenido la oportunidad de ver.
La película está basada en
un asesino real apodado “El monstruo”, que cometió diversos crímenes en la
ciudad de Florencia, ya hable de este asesino en otra reseña, en concreto en la
de “El asesino de Florencia”, también de 1986, dirigida por Cesare Ferrario y
que es tan mala como esta.
El guion está escrito
entre el propio director, Ernesto Gastaldi y Giuliano Carnimeo, palabras mayores
estos últimos en el cine italiano de la época, y empieza bien, con el asesinato
sanguinolento de una pareja, con mucho gore y salvajismo, pero luego tenemos la
investigación de la joven Christiana, con escenas ridículas que la llevan a indagar
en un bar donde paran por la noche todos los “mirones” de la ciudad.
De aquí al final solo se
salva otro asesinato, con el criminal cortando la zona púbica de una chica, en
una escena bastante sangrienta, en cierto modo los pocos crímenes que vemos nos
pueden recordar a grandes títulos del género como “El destripador de Nueva York”
(Lucio Fulci, 1982) o “Giallo a Venezia” (Mario Landi, 1979), pero es que el
resto de la película es pésima y encima acaba fatal, uno de los peores finales
que recuerdo en un giallo. Título para olvidar.
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